La educación va más allá de adquirir conocimientos y competencias. Implica provocar un cambio, desafiando pensamientos y cultivando la responsabilidad. La escuela actúa como umbral hacia el mundo, liberándonos de nuestras limitaciones y preparándonos para cuidar y pensar en el mundo. La escuela debe mantener su promesa educativa, pero su estructura y función deben adaptarse a las necesidades cambiantes. Ignorar esta realidad problemática o aferrarse a enfoques conservadores, autoritarios o reaccionarios podría socavar la promesa educativa de la escuela. El umbral escolar es crucial para su funcionamiento y relevancia. Sigue leyendo
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